N0 825 A
Suplemento De Navidad Diciembre 25, 2022
Navidad |
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Mural de la iglesia de San Juan Bautista en el río Jordán que muestra el nacimiento de Jesucristo |
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Otros nombres |
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Tipo |
festividad cristiana, festividad pública y festivo federal |
Ubicación |
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Comienzo |
Siglo iv |
Fecha |
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Origen de la celebración |
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Motivo |
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La Navidad (en latín nativitas, «nacimiento») es
una de las festividades más importantes del cristianismo, junto con
la Pascua de resurrección y Pentecostés. Esta solemnidad, que
conmemora el nacimiento de Jesucristo en Belén, se celebra
el 25 de diciembre en la Iglesia católica, en la Iglesia
anglicana, en algunas comunidades protestantes y en la mayoría de
las Iglesias ortodoxas. En algunas de estas tradiciones también
el 24, la Nochebuena (en inglés, Christmas Eve;
en alemán, Heiligabend o Heiliger Abend) y
el 26 (Second day of Christmas, zweiter Weihnachtsfeiertag o Stephanstag)
son partes importantes de la fiesta de Navidad.
En cambio, se festeja el 6 de
enero o el 7 de enero en otras Iglesias ortodoxas como
la Iglesia ortodoxa rusa o la Iglesia ortodoxa de
Jerusalén (6 de enero) o la Iglesia ortodoxa de Ucrania (7 de enero),
instituciones que no aceptaron la reforma hecha al calendario
juliano para pasar al calendario conocido como gregoriano, nombre
derivado de su reformador, el papa Gregorio XIII. El 25 de diciembre
es un día festivo en muchos países celebrado por millones de personas en todo
el mundo y también por un gran número de no cristianos.1
Los angloparlantes utilizan el
término Christmas, cuyo significado es ‘misa (mass) de Cristo’.
En algunas lenguas germánicas, como el alemán, la fiesta se
denomina Weihnachten, que significa ‘noche(s) consagrada(s)’. Las fiestas
de la Navidad se proponen, como su nombre indica, celebrar la Natividad (es
decir, el nacimiento) de Jesús de Nazaret.
La Navidad inicia un tiempo
litúrgico llamado tiempo de Navidad, que finaliza con la solemnidad
del Bautismo del Señor. Coloquialmente, al periodo que comienza con la Navidad
y finaliza con la Epifanía del Señor también se le conoce
como pascuas.
Existen varias teorías sobre cómo se llegó a celebrar la Navidad el 25 de diciembre, que surgen desde diversos modos de indagar, según algunos datos conocidos, en qué fecha habría nacido Jesús.
Orígenes de la Navidad
Alegoría de Cristo en forma del dios
solar Helios o Sol Invicto conduciendo su carroza.
Mosaico del siglo iii d. C. de las grutas vaticanas en
la basílica de San Pedro en el techo de la tumba del papa Julio
I.
Los orígenes pueden variar de acuerdo a la festividad. Aunque la fecha exacta del nacimiento de Jesús de Nazaret no se encuentra registrada ni en el Antiguo Testamento ni el Nuevo Testamento (Biblia), el 25 de diciembre ha sido significativo en los pueblos de la antigüedad que celebraban durante el solsticio del invierno en el hemisferio norte (desde el 21 de diciembre). La adopción de esa fecha se realizó siglos después, empezando por el testimonio de Sexto Julio Africano en el año 221 acerca de la fecha de nacimiento en Judea y el calendario litúrgico filocaliano de 354 después de Cristo.
Cálculo de la fecha de Navidad según los Evangelios
Adoración de los pastores, obra de Gerard van Honthorst que escenifica la Navidad. Fue
presentada el 25 de diciembre de 1622.
Algunos expertos han intentado calcular
la fecha del nacimiento de Jesús tomando la Biblia como fuente. En
Lucas6 se afirma
que en el momento de la concepción de Juan el
Bautista, Zacarías su padre, sacerdote del grupo de Abdías,
oficiaba en el Templo de Jerusalén y, según Lucas,7 Jesús
nació aproximadamente seis meses después de Juan. Crónicas8 indica
que había 24 grupos de sacerdotes que servían por turnos en el templo y al
grupo de Abdías le correspondía el octavo turno. Contando los turnos desde el
comienzo del año, al grupo de Abdías le correspondió servir a comienzos de
junio (del 8 al 14 del tercer mes del calendario lunar hebreo). Siguiendo esta
hipótesis, si
los embarazos de Isabel y María fueron normales,
Juan nació en marzo y Jesús en septiembre. Esta fecha sería compatible con la
indicación de la Biblia, según la cual la noche del nacimiento de Jesús los pastores cuidaban
los rebaños al aire libre, lo cual difícilmente podría haber ocurrido en
diciembre. Cualquier cálculo sobre el nacimiento de Jesús debe estar ajustado a
esta fuente primaria, por lo que la fecha correcta debe estar entre septiembre
y octubre, principios de otoño. Además, debe tomarse en cuenta el censo
ordenado por César al tiempo del nacimiento del Hijo de Dios,10 lo cual
obviamente no pudo haber sido en diciembre, época de intenso frío en Jerusalén,
la razón es que el pueblo judío era proclive a la rebelión y hubiera sido
imprudente ordenar un censo en esa época del año.
Como los turnos eran semanales, tal
y como lo confirman los manuscritos del Mar Muerto, descubiertos
en Qumrán, cada grupo servía dos veces al año y nuevamente le correspondía
al grupo de Abdías el turno a finales de septiembre (del 24 al 30 del octavo
mes judío). Si se toma esta segunda fecha como punto de partida, Juan habría
nacido a finales de junio y Jesús a finales de diciembre. Así, algunos de los
primeros escritores cristianos (Juan Crisóstomo, 347-407) enseñaron que
Zacarías recibió el mensaje acerca del nacimiento de Juan en el día del
Perdón, el cual llegaba en septiembre u octubre.
Otros cálculos
Por otra parte, según los
historiadores, cuando el Templo fue destruido en el año 70, el grupo sacerdotal
de Joyarib estaba sirviendo. Si el servicio sacerdotal no fue interrumpido
desde el tiempo de Zacarías hasta la destrucción del templo, este cálculo tiene
al turno de Abdías en la primera semana de octubre, por lo que algunos creen
que el 6 de enero puede ser el día correcto.
En un tratado anónimo sobre solsticios y equinoccios se afirmó que «Nuestro Señor fue concebido el 8 de las calendas de abril en el mes de marzo (25 de marzo), que es el día de la Pasión del Señor y de su concepción, pues fue concebido el mismo día en que murió». Si fue concebido el 25 de marzo, la celebración de su nacimiento se fijaría nueve meses después, es decir, el 25 de diciembre.
Fiestas en otras culturas en torno
al 25 de diciembre
Los aztecas celebraban el nacimiento de uno de sus dioses en
invierno: Huitzilopochtli.
Algunas festividades que coinciden
con ese periodo fueron de carácter pagano. Algunas culturas mencionan en sus
rituales astrológicos a algún dios sol; tales
como Apolo y Helios (en Roma y Grecia), Mitra (en Persia), Huitzilopochtli
(en Tenochtitlán),
entre otros. Algunas culturas creían que el dios del sol nació el 21 de
diciembre, el día más corto del año, y que los días se hacían más largos a
medida que el dios se hacía más viejo. En otras culturas se creía que el dios
del sol murió ese día, solo para volver a otro ciclo:
Celebración del Capac Raymi, era
liderada por el Emperador Inca. Alusión hecha por Guamán
Poma.
- Los romanos celebraban
el 25 de diciembre la fiesta del Natalis Solis Invicti o Nacimiento
del Sol invicto, asociada al nacimiento de Apolo.15 El
25 de diciembre fue considerado como día del solsticio de invierno, y que
los romanos llamaron bruma; cuando Julio
César introdujo su calendario en el año 45 a. C.,
el 25 de diciembre debió ubicarse entre el 21 y 22 de diciembre de
nuestro Calendario Gregoriano. De esta fiesta, se tomó la idea del 25
de diciembre como fecha del nacimiento de Jesucristo. Otro festival
romano llamado Saturnalia, en honor a Saturno, duraba
cerca de siete días e incluía el solsticio de invierno. Por esta
celebración los romanos posponían todos los negocios y guerras, había
intercambio de regalos, y liberaban temporalmente a sus esclavos.
Tales tradiciones se asemejan a las actuales tradiciones de Navidad y se
utilizaron para establecer un acoplamiento entre los dos días de fiesta.
- Los germanos y escandinavos celebraban el 26
de diciembre el nacimiento de Frey, dios nórdico del sol
naciente, la lluvia y la fertilidad. En esas fiestas adornaban un árbol de
hoja perenne, que representaba al Yggdrasil o árbol del
Universo, costumbre que se transformó en el árbol de
Navidad cuando llegó el cristianismo al norte de Europa.18
- Los aztecas celebraban durante el invierno, el advenimiento de Huitzilopochtli, dios del sol y de la guerra, en el mes Panquetzaliztli, que equivaldría aproximadamente al período del 7 al 26 de diciembre de nuestro calendario. Aprovechando la coincidencia de fechas, los primeros evangelizadores, los religiosos agustinos, promovieron la celebración de la Navidad y así desapareció el dios prehispánico y mantuvieron la celebración, dándole características cristianas.
- Los incas celebraban
el renacimiento de Inti o el dios Sol, la fiesta era llamada Cápac
Raymi o Fiesta del sol poderoso que por su
extensión también abarcaba y daba nombre al mes, por ende este era el
primer mes del calendario inca. Esta fiesta era la
contraparte del Inti Raymi de junio, pues el 23 de diciembre
es el solsticio de verano austral y el Inti Raymi sucede en el solsticio
de invierno austral. En el solsticio de verano austral el Sol alcanza su
mayor poder (es viejo) y muere, pero vuelve a nacer para alcanzar su
madurez en junio, luego declina hasta diciembre, y así se completaría el
ciclo de vida del Sol. Esta fiesta tenía una ceremonia de iniciación en la
vida adulta de los varones jóvenes del imperio, dicha iniciación era
conocida como Warachikuy.
Establecimiento
del 25 de diciembre como día de la Navidad
Existen diversas teorías sobre el
origen del 25 de diciembre como día de la Navidad. Según defiende William J.
Thige, ya en el siglo iii se celebraría el nacimiento de Cristo el 25
de diciembre, aun antes de que los romanos celebraran la fiesta del Sol
invencible (Sol Invictus).
Según otros autores, la celebración
de esta fiesta el 25 de diciembre se debe a la antigua celebración del
nacimiento anual del dios-Sol en el solsticio de invierno (natalis
invicti Solis), adaptada por la Iglesia católica en el tercer siglo
d. C. para permitir la conversión de los pueblos paganos.
En Antioquía, probablemente en
386, Juan Crisóstomo impulsó a la comunidad a unir la celebración del
nacimiento de Cristo con el del 25 de diciembre, aunque parte de la comunidad
ya guardaba ese día por lo menos desde diez años antes.
En el Imperio romano, las
celebraciones de Saturno durante la semana del solsticio, que eran el
acontecimiento social principal, llegaban a su apogeo el 25 de diciembre. Para
hacer más fácil que los romanos pudiesen convertirse al cristianismo sin
abandonar sus festividades, el papa Julio I pidió en el 350 que el
nacimiento de Cristo fuera celebrado en esa misma fecha y finalmente el
papa Liberio decreta este día como el nacimiento de Jesús de Nazaret en 354. La primera
mención de un banquete de Navidad en tal fecha en Constantinopla, data de 379,
bajo Gregorio Nacianceno. La fiesta fue introducida
en Antioquía hacia 380. En Jerusalén, Egeria, en el
siglo iv, atestiguó el banquete de la presentación, cuarenta días después
del 6 de enero, el 15 de febrero, que debe haber sido la fecha de celebración
del nacimiento. El banquete de diciembre alcanzó Egipto en el
siglo v.
Algunas tradiciones de la Navidad, particularmente las de Escandinavia, tienen su origen en la celebración germánica de Yule, como son el árbol de Navidad. Allí la Navidad se conoce como Yule (o jul).
Un día como
hoy 25 de Diciembre
274 - el emperador romano Aureliano
dedica un templo al dios Sol Invictus en el tercer día después del solsticio y
el día del renacimiento del Sol. Esta religión (predecesora del mitraísmo), que
es en esencia monoteísta, se convierte en la religión estatal de Roma.
350 - el papa Julio I sugiere que el
nacimiento de Jesús ―de fecha desconocida― sea celebrado este día.
354 - el papa Liberio decreta este
día como el nacimiento de Jesús de Nazaret
379 - en Constantinopla, Gregorio
Nacianceno realiza la primera mención de un «banquete navideño».
800 - en la basílica de San Pedro
(Roma), el papa León III corona a Carlomagno.
893 - en Dvin (Armenia) sucede un
terremoto que mata a unas 30 000 personas. (Véase Terremotos en la antigüedad).
1066 - en Inglaterra, Guillermo el
Conquistador es coronado rey.
1223 - en Italia, san Francisco de
Asís inventa el primer pesebre.
1356 - en Metz, el emperador Carlos
IV de Luxemburgo promulga la Bula de Oro, ley constitucional fundamental del
Sacro Imperio Romano Germánico.
1492 - en un banco de arena frente a
la isla La Española (hoy Haití y República Dominicana) encalla la carabela
Santa María en su primer viaje a América; con sus restos se construyó el primer
establecimiento español en América, llamado Fuerte Navidad.
1553 - en Chile, los mapuches (al
mando de Lautaro) vencen a los españoles en la Batalla de Tucapel y ejecutan al
gobernador Pedro de Valdivia.
1642 – Nace Isaac Newton, físico y matemático británico, considerado
uno de los más grandes científicos de la historia.
1717 - en el Mar del Norte, una
marea ciclónica afecta las costas de Alemania, Escandinavia y los Países Bajos.
Mueren unas 14 000 personas.
1758 – Reaparece el cometa Halley.
El astrónomo inglés Edmund Halley, había predicho en 1705 su regreso para el
año 1757, un año antes de lo esperado, pero no pudo comprobar su predicción ya
que había fallecido en 1742.
1780 - en Marruecos, el sultán
ratifica el tratado de amistad con Carlos III de España, firmado por el conde
de Floridablanca y el embajador marroquí, Sidi Mohammed ben Otmán, que obliga a
los navíos británicos a abandonar la costa de Tetuán y el puerto de Tánger.
1812 - en Uruguay, José Gervasio
Artigas, jefe de las fuerzas independentistas, se niega a reintegrarse con sus
hombres a las fuerzas porteñas que sitian Montevideo, en poder de los
españoles.
1833 - en Loyola ―en el marco de la Primera guerra carlista―, Carlos María Isidro de Borbón (pretendiente carlista al trono de [[España) se hace coronar rey, con el nombre de Carlos VII.
1851 - en Santiago de Chile se
inaugura el primer ferrocarril de Sudamérica.
1883 – Nace el pintor francés Maurice Utrillo.
1884 - a las 21.08, un terremoto,
con epicentro situado entre las provincias de Málaga y Granada, de magnitud
estimada entre 6,5 a 7 (Richter) e intensidad 10 (en la escala MSK), causa más
de 1200 muertos y cerca de 1500 heridos en las poblaciones de Arenas del Rey
(Granada) y los municipios del Llano de Zafarraya (Granada). Los efectos del
terremoto fueron más desastrosos al coincidir con una fuerte nevada.
1926 - Hirohito, príncipe heredero
de Japón, sucede a su padre Yoshihito como emperador.
1926 - en Estados Unidos, el río
Cumberland cubre la ciudad de Nashville con 17 m de altura de agua. Desde
septiembre de 1926 hasta junio de 1927 sucede la Gran Inundación del río
Misisipi; este río alcanzó los 10 m por encima de su nivel normal, y los 97 km
de anchura.
1932 - la provincia de Gansu (China)
es sacudida por un terremoto grado 7,6 que mata aproximadamente a 70 000
personas.
1932 - la I. G. Farbeindustrie
alemana, en la que trabajaba Gerhard Domagk, solicita la patente del
"prontosil", primera aplicación médica de las sulfamidas.
1941 - tropas japonesas entran en
Hong Kong.
1946 - en Shanghái colisionan tres
aviones de pasajeros a causa de la niebla, con un balance de 71 muertos.
1948 - en Israel se decreta un
oscurecimiento de todas las ciudades tras los ataques aéreos árabes.
1949 - en Argentina, Juan Domingo
Perón incrementa la lucha contra la prensa de la oposición, prohibiendo los
periódicos de provincias.
1964 - en el océano Índico, una
marea viva originada por un ciclón causa aproximadamente 4000 víctimas en
Ceilán, y unas 3000 en el estado de Madrás (India).
1968 - en la aldea Kilavenmani
(Tamil Nadú, sur de India), 42 dalit (intocables) son quemados vivos como
represalia por una campaña para aumentar los sueldos de estos trabajadores.
1971 - en un hotel de lujo en Seúl
(Corea del Sur), un incendio de grandes proporciones ocasiona más de 160
víctimas mortales.
1978 - comienza el ataque vietnamita
a Camboya.
1986 - mueren 62 personas al
estallar un avión iraquí, secuestrado en vuelo entre Bagdad y Ammán por
miembros de Yihad Islámica.
1989 - en Rumanía triunfa la
Revolución rumana y cae el sangriento régimen comunista del dictador Nicolae
Ceauşescu. Él y su esposa Elena son condenados a muerte y ejecutados
inmediatamente.
1990 - en Estados Unidos se realiza
la primera prueba exitosa del sistema que se convertirá en la World Wide Web
(Internet).
1991 - dimite Mijaíl Gorbachov y
desaparece la Unión Soviética (URSS), que pasa a denominarse Comunidad de
Estados Independientes (CEI).
1992 - en Serbia, el neocomunista
Slobodan Milošević es reelegido presidente.
2003 - la sonda Beagle 2 (que había
sido lanzada desde la nave Mars Express Spacecraft el 19 de diciembre)
desaparece poco antes de su aterrizaje programado.
Reflexiones
Cuenta la historia que un hombre que
no creía en Dios, su familia, por el contrario, era una fiel creyente.
Una Nochebuena, la esposa se disponía
a asistir al oficio navideño de la parroquia con sus hijos, le pidió al esposo
que los acompañara, pero este se negó.
¡Qué tontería! dijo. ¿Por qué Dios
tomaría la forma de hombre en la persona de Jesús?, no le veo sentido, es
ridículo, no puedo creer en semejante tontería. Sin hacer ningún comentario
ella y sus hijos se marcharon.
Minutos más tarde, el viento empezó
a soplar con mucha fuerza y se desató una ventisca. El hombre observaba por la
ventana una fuerte tormenta de nieve. De repente, oyó un golpe muy fuerte sobre
una de las ventanas. Miró hacia afuera, pero no lograba ver nada.
Cuando la nevada empezó a cesar, se
aventuró a salir para averiguar qué había pasado y descubrió su patio trasero,
una bandada de gansos salvajes que fueron sorprendidos por la tormenta de
nieve. Perdidos y confundidos, habían acabado en aquella finca. Aleteaban y
volaban en círculos por todas partes, cegados por la borrasca, sin seguir un
rumbo fijo. El hombre pensó que, posiblemente, el ruido que oyó era de las aves
que había chocado contra su ventana.
Sintió pena por lo que decidió
ayudarlos. Sería ideal que se quedaran en el granero, estarán a salvo durante
la noche mientras pasa la tormenta, así que, dirigiéndose al establo, abrió las
puertas, con la esperanza de que las aves advirtieran que estaba abierto y
entraran. Los gansos, no obstante, se limitaron a revolotear sin tomar en
cuenta que la salvación estaba a pocos metros de ellos. El hombre intentó
llamar la atención de las aves, pero sólo consiguió asustarlas y que se
alejaran más. Tomó pan, lo fue esparciendo formando un camino directo al
establo. Sin embargo, los gansos no entendieron el mensaje.
El hombre empezó a sentir
frustración, corrió tras ellos tratando de ahuyentarlos en dirección al
granero, lo único que consiguió fue asustarlos más y que se dispersaran en
todas direccione. Por mucho que lo intentara, no conseguía que entraran al
lugar que les salvaría la vida.
Se pregunto: ¿Por qué no me
seguirán?, exclamó frustrado, ¿Es que no se dan cuenta de que ese es el único
sitio donde podrán sobrevivir a la nevada?
Pensó por un momento y se dio cuenta
de que las aves no seguirían a un ser humano. Si yo fuera uno de ellos,
entonces sí que podría salvarlos, se dijo. Seguidamente, se le ocurrió una
idea. Entró al establo, agarró un ganso de su propiedad y lo llevó abrazado lo
paseo entre sus semejantes, y luego, lo soltó, este voló entre los demás y se
fue directamente al interior del establo. Una por una, las otras aves lo siguieron
hasta que todas estuvieron a salvo.
El aldeano se quedó en silencio por
un momento, mientras las palabras que había pronunciado hacía un instante aún
le resonaban en su mente: “Si yo
fuera uno de ellos”, ¡Entonces sí que podría salvarlos!, era lo mismo
que le había dicho a su esposa: ¿Por qué iba Dios a querer, hacerse hombre
para estar entre nosotros?, ¡qué ridiculez!
De pronto, todo empezó a cobrar
sentido. Entendió que eso era precisamente lo que había hecho Dios. Nosotros
somos como aquellos gansos: estamos ciegos, perdidos y a punto de perecer. Dios
se hizo hombre con el fin de indicarnos el camino y guiarnos a la salvación.
Cuando cesaron los vientos y la
nevada, corrió al encuentro de su familia a la iglesia, donde le permitió a
Jesús ser parte de su vida.
Si tu camino está en tinieblas o estas cegado como el de los gansos, entonces recuerda estas palabras de Jesús: “... Yo soy el Camino, la Verdad, y la Vida. Sin mí, nadie pude llegar a Dios el Padre” Juan 14:6
5 historias de navidad para recordar
Estas son historias de ilusión, sorpresa, alegría y amor. No te las pierdas.
1. Es lo único que deseo
RICK BRAGG
Debo de haber tenido unos nueve años
de edad, y era demasiado serio y digno para sentarme sobre el regazo de Papá
Noel en la tienda de departamentos Mason's, en Anniston, Alabama, pero lo
suficientemente chico aún para pedirle -ipor favor, por favor, por favor!- un
soldado G.I. Joe en la Navidad.
-Ya estás muy grandecito para jugar con muñecos -me dijo Sam, mi hermano mayor,
quien solía jactarse de que, el día que nació, se sacudió el polvo en la sala
de partos y se fue a casa caminando.
-G.I. Joe no es un muñeco -repliqué, enojado.
-Sí lo es.
-Claro que no!
En 1968, en el condado de Calhoun, Alabama, esa discusión se consideraba un
diálogo intelectual. Estaba yo a punto de pellizcar a Sam cuando mi cansada
madre me tomó del brazo para que me extasiara con la nieve artificial que caía
sobre un ciervo que tenía limpiapipas en lugar de cuernos. Sam se acercó
resueltamente a Papá Noel, como un adulto pequeño, para pedirle -me parece- una
sierra eléctrica y algunos cartuchos para escopeta.
-¿crees que me lo traerá? -le pregunté a mi madre.
En aquel entonces ella lavaba ropa ajena y limpiaba casas cuando podía. La
cercanía de la Navidad le causaba mucho temor: temor de que para sus tres hijos
fuera un tiempo de enorme desilusión.
-No lo sé, hijo -contestó, mientras con la otra mano sujetaba a mi hermano
menor, Mark, quien se asustó al ver a ese hombre extraño con traje rojo e
intentaba huir a las montañas.
-Es lo único que deseo -dije, esperanzado.
No sabía yo que desear algo era como darle a mamá una patada en el vientre.
Cuando escribo acerca de mi niñez y la Navidad me resulta difícil no sonar un
poco como Dickens. No me refiero a que escriba tan bien, sino a que, cuando era
niño, la Navidad era para mí como
un sube y baja de tristeza y júbilo, tal vez la prueba más clara de la
brecha entre pobres y ricos. Un G.I. Joe era un juguete caro, que costaba más
de lo que mi madre a veces ganaba en un día; sin embargo, ahora que tengo más
de 50 años y evoco aquellos tiempos, los desengaños se disipan en mi
mente y surgen recuerdos de cosas que se parecen mucho a los milagros. Al
día siguiente entré cabizbajo en la cocina de mi tía Juanita, quien era delgada
y baja de estatura, pero tan fuerte como un hombre. Me daba galletitas con
crema de maní y pollo frito, aunque no en ese orden.
- ¿Qué va a traerte Papá Noel, cariño? -me preguntó.
-Yo quería un G.I. Joe -repuse-, pero Sam me dijo que solo las niñas juegan con
muñecos, y como no soy una niña, creo que ya no lo quiero.
Unos días después, vi una caja con mi nombre junto a su árbol navideño. La había envuelto con papel delgado,
tanto que se podía ver a través de él: ¡iera un G.I. Joe!, el vestido con
uniforme de marinero, pero no me habría importado que llevara ropa de vendedor
de seguros. Me pasé los días que faltaban para la Navidad con una extraña
sensación de paz. Cuando abrí la caja, mi mamá fingió sorpresa. Papá Noel,
dijo, seguramente se había aliado con mi tía Juanita. Adoro a mi tía Juanita
por haber hecho eso. Amo a mi madre por hacer todo lo que podía, día tras día.
Sé que la Navidad significa mucho más que todas esas cosas materiales, que
incluso tal vez esté mal calificar esas cosas de milagros, por pequeños que
sean. El milagro, creo, está en el corazón de esas dos mujeres.
Rick Bragg
es autor de libros, entre ellos All Over but the Shoutin' y The Prince of
Frogtown. En 1996 ganó el Premio Pulitzer en la categoría
de reportajes.
2. El regalo de lo posible
ESMERALDA SANTIAGO
Aquel 24 de diciembre, las calles de
Boston estaban repletas de turistas y residentes con abrigos de lana y ropa de
franela. Compradores, vendedores y curiosos se arremolinaban junto a mí. En los
comercios sonaban las canciones navideñas, y en las veredas, los músicos
callejeros daban lo mejor de sí. Todo el mundo, al parecer, estaba acompañado
de otra persona que sonreía o carcajeaba. Yo estaba sola. Como soy la mayor de
los 11 hijos de una familia puertorriqueña y me crié con ellos en un atestado
barrio de la Ciudad de Nueva York, había pasado gran parte de mi vida
deseando la soledad. Ahora, convertida en una estudiante universitaria de 27
años de edad que estaba afrontando la ruptura de una relación amorosa que había
durado siete años, por fin contemplaba lo que tanto había anhelado, pero no
estaba muy segura de que me gustaba.
Había deseado con el alma estar
sola, pero no en Navidad. Mi familia había regresado a Puerto Rico, mis amigos
se habían ido a pasar las fiestas de fin de año en casa, y mis conocidos
estaban muy ocupados en su propia vida.
Empezaba a anochecer, y el inevitable regreso a mi departamento vacío me
provocó tristeza. Las lucecitas que decoraban las vidrieras y las puertas me
atraían, y deseaba que alguien saliera de un hogar y me invitara a entrar a una
habitación confortable y tibia, con un árbol navideño primoroso, salpicado de
nieve artificial y colocado sobre un pie de terciopelo cubierto de regalos. Me
detuve en un pequeño supermercado, y me deprimí aún más al ver a la gente
llenando sus canastos con cosas ricas. Los dátiles, los higos, las nueces y las
avellanas me hicieron recordar los regalos que recibíamos de niños en la
Navidad en Puerto Rico, porque los obsequios más preciados se reservaban para
el Día de Reyes, el 6 de enero. Extrañaba a mi familia: sus fiestas ruidosas,
los bailes, los tazones de arroz con porotos gandul, la piel crujiente y con
sabor a ajo del cerdo asado, y las tortas de banana y yuca envueltas en hojas
de plátano. Quería llorar por haber deseado estar sola y haberlo conseguido.
Frente a la iglesia habían colocado un nacimiento, con figuras de José y María
junto al pesebre esperando la llegada del Niño Jesús. Me quedé contemplando la
escena con otros transeúntes, algunos de los cuales se santiguaban y rezaban.
Mientras me dirigía a casa, me di cuenta de que la historia del peregrinar de
José y María de puerta en puerta en busca de posada se parecía mucho a mi
propia historia. Haber dejado Puerto Rico seguía siendo una herida en mi alma,
y aún luchaba por saber en quién me había convertido después de 15 años de
vivir en los Estados Unidos. Había llorado mis pérdidas, pero por primera vez
reconocí lo que había ganado. Era independiente, instruida, osada y tenía
salud. Me quedaba una vida por delante, llena de posibilidades. A veces, el
mejor regalo es el que nos damos nosotros mismos. Aquella Navidad me percaté de
lo que había logrado hasta ese momento, y me di permiso de seguir adelante, sin
temores. Es el mejor regalo que he recibido en mi vida, el que más valoro.
Esmeralda Santiago es autora de seis libros, entre ellos el exitoso relato "Cuando era puertorriqueña". El más reciente es la novela Conquistadora.
3. Dulzura compartida
TAYARI JONES
Cada 25 de diciembre mi madre espera
que sus hijos estén presentes en casa, intercambien regalos y coman pavo. Y
cuando se pone su suéter navideño, más vale que todos se animen. Como era
natural, yo iba a ser la primera Jorres en rebelarse. Por ser la segunda de
tres hermanos y artista, quería seguir mis propias reglas y adoptar tradiciones
nuevas. Una biografía de Flannery O'Connor me dio la idea: ¡pasaría la Navidad
en una colonia de artistas! Nadie se alegró con la noticia. Por la forma como
se quejó mi mamá, parecía que iba a divorciarme de la familia. Pero me mantuve
firme e hice planes para mi aventura de invierno en New Hampshire.
La Colonia MacDowell era todo lo que podría yo haber deseado. En ella había 25
o 30 artistas, y era justo como la había imaginado. Me sentía como si fuera un
personaje de una estrafalaria película independiente. Al llegar la Nochebuena,
ya llevaba yo más de una semana en la colonia. Ver caer la nieve empezaba a
aburrirme, pero no se lo habría confesado a nadie nunca. Todo el mundo se
divertía de lo lindo. iPaseos en trineo y whisky! ¡iCharlas sesudas frente a la
chimenea! Todos felices menos yo. ¿Qué me pasaba? Era la fiesta decembrina de
mis sueños: sin renos de plástico paciendo en el jardín de la casa, sin
partidos de fútbol americano en la televisión y sin suéteres navideños a la
vista. La gente allí ni siquiera decía "Navidad", sino
"fiesta". El refinamiento más puro. Entonces, ¿por qué me sentía tan
triste? Al final telefoneé a casa desde la sala común. Mi padre contestó, pero
apenas oía su voz debido al intenso ruido de fondo de los artistas. Papá bajó
el volumen del disco navideño de Stevie Wonder que estaba escuchando y me dijo
que mi madre se había ido de compras con mis hermanos. Eso me enfureció:
estaban pasando una Navidad estupenda sin mí.
En la mañana de Navidad, aunque caía una fuerte nevada, apareció un paquete
grande junto a la puerta de mi habitación. En él estaba anotado mi nombre con
la preciosa letra manuscrita de mi mamá. Levanté el paquete como una niña de
cinco años. Contenía un pastel relleno con betún rojo, mi favorito, envuelto
con un montón de plástico de burbujas. La sencilla tarjeta que lo acompañaba
decía: Feliz Navidad. Te queremos mucho. Mientras rebanaba el pastel, todos los
artistas me rodearon: jóvenes, viejos, ateos y creyentes. Mamá había enviado un
auténtico regalo hecho en casa, no un simple capricho de moda. Fue un pequeño
milagro navideño que un pastel haya alcanzado para tantos. Lo comimos con las
manos sobre servilletas de papel, para satisfacer un hambre de dulzura que, sin
saberlo, todos sentíamos.
Tayari Jones es autora de tres novelas, la más reciente Silver Sparrow.
4. Se requiere un poco de ensamblaje
FLOYD SKLOOT
Mi hija Rebecca, de cinco años,
sabía exactamente qué quería de regalo en la Navidad de 1977, así que me lo
dijo. Aún quería el paraguas de plástico rosa y verde, con copa transparente,
del que había hablado tanto: sería grandioso para ver cómo caía la lluvia sobre
él. También quería libros, un camisón largo de franela y unas pantuflas
mullidas. Todo eso estaba muy bien, pero, en realidad, sólo había una cosa que
le importaba: una Casa de Ciudad de Barbie, con todos sus accesorios listos
para armar. Saber eso me sorprendió. A
ella no le gustaban las muñecas Barbie; prefería los animales de
peluche, y no le llamaba la atención jugar en un ambiente estructurado. Rebecca
siempre había sido una niña que establecía sus propias reglas, diseñaba su
propio mundo y hacía las cosas a su manera. Pensé que el meollo del asunto tal
vez no fuera la Barbie, sino la casa, un lugar que pudiera reclamar como suyo,
pues nos habíamos mudado cinco veces a lo largo de su corta vida.
Al día siguiente, me detuve en el centro comercial. La enorme caja de la Casa
de Ciudad de Barbie tenía dos letreros con exclamaciones: "¡Tres pisos de
diversión con gran estilo! ¡El ascensor se detiene en todos los pisos!" Y
uno que decía: "Se requiere un poco de ensamblaje" iAy no! Mi
historial respecto a armar cosas era terrible. Nací en Brooklyn y me crié en
edificios de apartamentos, con una familia que no construía nada. Unos años
antes, me había tardado una semana en ensamblar un juego de jardín para niños;
tenía tantas piezas, que me pasé las primeras cuatro horas clasificándolas y
llorando, y las últimas dos horas tratando de averiguar por qué me sobraban
tantas piezas.
Armé la casa de Barbie en la Nochebuena. Lograr que quedara nivelada, que no
pareciera que las columnas se habían derretido y luego vuelto a congelar, y que
el ascensor funcionara, fueron tareas que casi superaron mis fuerzas. Y hacerlo
sin soltar palabrotas, en silencio para que mi hija no se despertara -si es que
estaba durmiendo-, aumentó el reto.
Cuando amaneció, había yo terminado. Al poco rato Rebecca entró en la sala, con
su oso de peluche bajo el brazo, fingiendo asombro y viéndose tan cansada como
lo estaba yo. Su sorpresa tal vez haya sido falsa, pero su alegría fue
absolutamente genuina y me conmueve hasta el día de hoy, 34 años después. Mi
hija me había alentado a hacer algo que no creía yo poder lograr. Era algo para
ella y, como mucho de lo que significa el privilegio de ser padre, logró
aflorar lo mejor de mí y me permitió disipar algunas dudas respecto a mis
habilidades. Ahora que lo recuerdo, tal vez había verdadera sorpresa en su
rostro al ver la Casa de Ciudad, no por el regalo en sí, sino porque estaba
ensamblada y seguía en pie bajo la luz matutina. O bien pudo ser algo más
sencillo: quizá se sorprendió porque había pensado armarla ella misma.
Floyd Skloot ha escrito 17libros, el más reciente de ellos una colección de cuentos: Cream of Kohlrabi El primer libro de su hija Rebecca, The Immortal Life of Henrietta Lacks, figuró en la lista de éxitos de la librería del The New York Times.
5. Una feliz y boba Navidad
JENNY ALLEN
Mi mejor Navidad fue el año en que
tuvimos a Ken y a Barbie en la punta de nuestro árbol. Primero pusimos allí un
ángel, y luego a los muñecos. Dejen que les cuente todo. Cuando mi hija,
Halley, tenía cuatro años de edad, contraté a un bailarín de ballet, Randy,
para que la cuidara algunas tardes por semana. Era alto, jovial y seguro de sí
mismo, siempre con el pecho por delante, y aunque apenas tenía 27 años, era
resuelto y de carácter firme. A lo largo de cuatro años, él y la niña
recorrieron la Ciudad de Nueva York en busca de aventuras: escalar la escultura
de Alicia en el País de las Maravillas en el Central Park, o sonreír a los
pequeños y graciosos pingüinos en el zoológico. Tenían su propio mundo y sus
propias pasiones: una devoción a los helados, a Elmo y a Pee-wee Herman. Randy
organizaba las fiestas de cumpleaños de Halley a la perfección.
Un año declaró que el tema era Peter Pan y le confeccionó a la niña un traje de
Campanita, con cascabelitos en el dobladillo, y convenció a mi padre para que
se presentara en la sala con un sombrero de pirata de ala ancha y un garfio
falso en vez de mano. Randy también se encargaba de mis fiestas para adultos, y
decidía mis atuendos, para lo cual buscaba y rebuscaba en las tiendas de
segunda mano hasta encontrar el collar de piedras de fantasía que hiciera juego
con el vestido que ya me había obligado a comprar. Cuando Halley tenía ocho
años, Randy se marchó de Nueva York para dirigir una compañía de ballet sin
grandes ambiciones en una pequeña ciudad de Colorado. Allí daba clases de
baile, creaba coreografías y animaba a secretarias y vendedores de computadoras
para que ejecutaran algunos pasos de ballet en el escenario. Halley lo echaba
mucho de menos, al igual que toda la familia, pero Randy le llamaba por
teléfono a menudo y le enviaba vestidos preciosos; cuando podía, nos visitaba
en la Navidad.
El año en que mi hija cumplió 10 de edad, di a luz a otra nifia. Ese mismo año
le diagnosticaron sida a Randy. Sin el menor asomo de autocompasión. por
teléfono me dijo que le quedaban unas cuantas células T y que había decidido
llamarlas Hugo, Paco y Luis. Parecía una locura que viajara, que se arriesgara
a que alguno de nosotros estornudara y lo hiciera enfermar de pulmmúa, pero él
quería visitarnos, y lo hizo. Seguía siendo el Randy alegre y afectuoso de
siempre. Aunque estaba terriblemente delgado, con los pómulos hundidos, los
ojos le brillaban.
Se llevó a Halley a recorrer la ciudad una vez más, con su hermanita, Julie,
sujeta a su pecho con un portabebés de tela. -Tenemos que hacer algo con este
árbol -nos dijo Randy un día. A mí el árbol, con sus mofios rojos, me parecía
bien, e incluso me enorgullecía un poco de que sus ramas brillaran con los
adornos. Unos días después, la mafiana del 31 de diciembre, Randy reunió a toda
la familia. Llevaba puesto el viejo sombrero de pirata, que sacó de una caja de
disfraces, del cual colgaban serpentinas de colores y le caían como pelo hasta
los hombros. Mientras lo observábamos -yo malhumorada al principio, pues me
preguntaba hasta qué punto debíamos ser pacientes con un invitado moribundo,
aunque lo amáramos como si fuera nuestro hermano-, quitó los adornos del árbol,
y luego sacó más serpentinas y un montón de silbatos y botellitas de champán de
plástico.
-Ahora lo convertiremos en un árbol de Afio Nuevo -anunció. iUn árbol de Afio
Nuevo! ¡iPor supuesto! Arrojamos las serpentinas al árbol, y atamos los
silbatos y las botellitas en todas sus ramas.
-Y ahora, amigos míos, ¡lel broche de oro! -exclamó Randy. Estirándose cuan
largo era, hasta la punta del árbol, quitó el ángel dorado de papel maché y en
su lugar colocó los muñecos de Halley: Ken, ataviado con esmoquin, y Barbie,
con un vestido de gala esplendoroso.
-IMiren ahí! -dijo, y esbozó una enorme sonrisa.
Era un árbol ridículo, pero maravilloso, feliz y perfecto. Randy vivió un año y
medio más. Ninguno de nosotros superará su muerte, puedo jurarlo, pero cada
Navidad brindamos por él, por su árbol, por su gran carácter y por la Navidad
en que nos ensefió que la valentía es un hombre con un sombrero de pirata y
bobas serpentinas como pelo.
Jenny Allen es autora de un libro de
fábulas para adultos titulado The Long Chalkboard. ilustrado por su esposo,
Jules Feiffer, y un monólogo suyo sobre el cáncer de ovario, I Got Sick Then 1
Got Better, se ha presentado en teatros, hospitales, universidades y
conferencias sobre el cáncer en todo Estados Unidos. (Revista Selecciones)
Curiosidades de la Navidad
El árbol iluminado, las estrellas,
Papá Noel o el Belén (o ambos), regalos, comidas, brindis... todos ellos tienen
lugar en la Navidad. Hoy repasamos algunas curiosidades que deberías saber
sobre ella.
Nos encanta la Navidad, ¿verdad? Nos reunimos con
familiares y amigos, compartimos regalos,
buena comida y muchas celebraciones
llenas de alegría y felicidad. ¿Sabes cuándo empezaron esas costumbres
en tu familia? Tales tradiciones nos unen a nuestra herencia y se transmitirán
a las generaciones venideras. Dichas tradiciones pueden incluir la forma en que
celebran el nacimiento de Cristo los cristianos o preparar un plato que cuenta
con una receta ancestral en la familia. No importa la cultura ni el lugar, el
espíritu navideño parece provenir de tradiciones que nos ayudan a celebrar la
alegría, el amor y la buena voluntad de la humanidad.
Hoy compartimos con vosotros una serie
de datos y tradiciones que reflejan las conexiones que compartimos con nuestra
familia mundial.
Es curioso, pero la Navidad como tal marca el nacimiento de Jesucristo el 25 de
diciembre, pero no se menciona el 25 de diciembre en la Biblia y
la mayoría de los historiadores creen que Jesucristo nació en primavera. ¿Por
qué escoger este día entonces? Probablemente se eligió el 25 de diciembre
porque coincidía con el antiguo
festival pagano Saturnalia, que honraba al dios agrícola Saturno con
fiestas, juegos de azar y regalos. Las saturnales eran consideradas una gran
festividad romana y uno de los actos implicaba un sacrificio en el Templo de
Saturno. El banquete público era digno de mención también.
Hay muchos datos extraños e
interesantes sobre la Navidad. Por ejemplo, ¿sabías que durante la Navidad hay
un pueblo en Perú donde jóvenes y mayores resuelven su rencor a puño limpio?
¿Por qué nos besamos bajo el muérdago o nos damos medias llenas de golosinas?
¿Ángeles cantando? Lo cierto es que no hay ninguna referencia a que los ángeles
canten en ninguna parte de la Biblia. ¿Sabías que la palabra Noel (Papá Noel) deriva de la expresión
francesa "les bonnes nouvelles" o "the good news" (buenas
noticias)? ¿Y que Jesús probablemente
nació en una cueva y no en un establo de madera, según los estudiosos
bíblicos?
Si crees saberlo todo sobre la época
más maravillosa del año, aquí te toparás con algunas curiosidades para que
tengas más ganas de celebrar el día de Navidad.
(Muy Interesante)
Las mejores frases de Navidad
La Navidad es una época de
celebraciones en familia y con los amigos, pero también un buen momento para
reflexionar sobre el año que termina.
Muy Interesante
05/12/2022
Navidad, una época para celebrar, reflexionar
sobre el año que termina, estar con la familia y los amigos y comer y beber
algo más de lo normal. Para conmemorar esta festividad, qué mejor que hacerlo con las frases más
evocadoras de esta entrañable fecha de la mano de ilustres escritores,
periodistas y hasta comediantes.
A continuación, te dejamos una selección de las que más nos gustan a nosotros, perfectas para compartir en redes sociales, WhatsApp, Telegram, postales o emails; cualquier medio es bueno para hacer llegar la magia y la felicidad de estos días hasta los que más queremos.
“Honraré la Navidad en mi corazón y procuraré conservarla durante todo el año” Charles Dickens.
“La Navidad no es una fecha; es un estado en la mente” Mary Ellen Chase.
“Bendita sea la fecha que une a todo el mundo en una conspiración de amor” Hamilton Wright Mabi.
“Ojalá pudiésemos meter el espíritu de Navidad en jarros y abrir un jarro cada mes del año” Harlan Miller.
“La Navidad no es un momento ni una estación, sino un estado de la mente. Valorar la paz y la generosidad y tener merced es comprender el verdadero significado de Navidad” Calvin Coolidge.
"La Navidad es la época del año en que se nos acaba el dinero antes que los amigos" Larry Wilde
“No existe la Navidad ideal, solo la Navidad que usted decida crear como reflejo de sus valores, deseos, queridos y tradiciones” Bill McKibben.
“¡Feliz, feliz Navidad, la que hace que nos acordemos de las ilusiones de nuestra infancia, le recuerde al abuelo las alegrías de su juventud, y le transporte al viajero a su chimenea y a su dulce hogar!” Charles Dickens.
“Aunque se pierdan otras cosas a lo largo de los años, mantengamos la Navidad como algo brillante. Regresemos a nuestra fe infantil” Grace Noll Crowell.
“La Navidad agita una varita mágica sobre el mundo, y por eso, todo es mas suave y mas hermoso” Norman Vicent Peale.
“La Navidad es la temporada para encender el fuego de la hospitalidad en el salón, y la genial llama de la caridad en el corazón” Washington Irving.
“La Navidad es la época del año en que se nos acaba el dinero antes que los amigos” Larry Wilde.
“Este es el mensaje de Navidad: nunca estamos solos” Taylor Caldwell.
"No hay nada más triste en este mundo que despertarse la mañana de Navidad y no ser un niño" Erma Bombeck.
"Siendo niños éramos agradecidos con los que nos llenaban los calcetines por Navidad. ¿Por qué no agradecíamos a Dios que llenara nuestros calcetines con nuestros pies?" Gilbert Keith Chesterton.
"La Navidad en mi casa es por lo menos seis o siete veces más agradable que en cualquier otro sitio. Empezamos a beber temprano, y cuando el resto de la gente ve un solo Santa Claus, nosotros vemos seis o siete" W. C. Fields.
"La Navidad no es una temporada, es un sentimiento" Edna Ferber.
"Navidad es la época en la que todos quieren que se olvide su pasado y se recuerde su presente. Lo que me gusta de las fiestas de Navidad de empresa es tener que buscar otro trabajo al día siguiente" Phyllis Diller.
"La Navidad es el día que une todos los tiempos" Alexander Smith.
"Cuando llega el día de Navidad, nos viene el mismo calor que sentíamos cuando éramos niños, el mismo calor que envuelve nuestro corazón y nuestro hogar" Joan Winmill Brown.
"La Navidad es una necesidad. Tiene que haber al menos un día en el año para recordarnos que estamos aquí para algo más que nosotros mismos" Arnold Eric Sevareid.
"Recuerda, este mes de diciembre que el amor pesa más que el oro" Josephine Dodge Daskam Bacon.
"Mi idea de Navidad, tanto pasada de moda
como moderna, es muy simple: amar a los demás. Pensémoslo, ¿por qué tenemos que
esperar a Navidad para hacerlo?" Bob Hope.
Humor
Enlaces
English for beginners | Czego szukasz w Święta?
https://www.youtube.com/watch?v=tU5Rnd-HM6A&ab_channel=Allegro
10 curiosidades Sobre La Navidad Que No Conoces
https://www.todo-mail.com/content.aspx?emailid=21164
Música
CANCIONES NAVIDEÑAS EN INGLES
Jingle Bell Rock
Bobby Helms
https://www.youtube.com/watch?v=Z0ajuTaHBtM&t=9s&ab_channel=BobbyHelms-Topic
Lanzada por primera vez por Bobby
Helms en 1957, "Jingle Bell Rock" alcanzó el puesto 29 en el
Billboard Hot 100 de EE. UU. Fue todo un éxito navideño (y lo sigue siendo).
Last Christmas
Wham!
https://www.youtube.com/watch?v=E8gmARGvPlI&t=25s&ab_channel=WhamVEVO
Cascabeles y sintetizadores de
música a partes igual, hicieron de este éxito de Wham! Un tema navideño inolvidable. Lo que más
distingue a 'Last Christmas' es la interpretación de George Michael con su
melancolía adorable que no pasa de moda.
'Rockin' Around the Christmas
Tree'
Brenda Lee
https://www.youtube.com/watch?v=1qYz7rfgLWE&t=4s&ab_channel=ChristmasMusic
Una de las canciones navideñas más atemporales jamás creadas, Brenda Lee
grabó por primera vez este himno festivo en 1958 cuando solo tenía 13 años. Ha
seguido regresando a las listas de éxitos navideños en los últimos años.
It's the Most Wonderful Time of
the Year
Andy Williams
https://www.youtube.com/watch?v=AN_R4pR1hck&t=16s&ab_channel=AndyWilliamsVEVO
Una canción navideña por excelencia.
Esta es una de las canciones que no deben faltar en tu lista de canciones
navideñas. La pieza fue escrita en 1963 por Edward Pola y George Wyle y grabada
por Andy Williams ese mismo año en su álbum navideño.
All I Want For Christmas Is You
Mariah Carey
https://www.youtube.com/watch?v=yXQViqx6GMY&t=13s&ab_channel=MariahCareyVEVO
Este omnipresente villancico
navideño de 1994 con un ritmo inspirado en los años 60 nos seduce con las
campanas de las iglesias y de los trineos, y múltiples declaraciones de amor.
Blue Christmas
Elvis Presley
https://www.youtube.com/watch?v=3KK6sMo8NBY&ab_channel=ElvisPresleyVEVO
Incluso el rey del rock, Elvis Presley, también cuenta con
acciones navideñas con su versión de Blue Christmas, aunque en realidad, él no
escribió la canción, sino que fue grabada inicialmente por Doye O'Dell en 1948.
Elvis Presley simplemente la hizo famosa.
Run, Run Rudolph
Chuck Berry
https://www.youtube.com/watch?v=YiadNVhaGwk&ab_channel=ChuckBerryVEVO
Con un poco más de movimiento de
caderas, “Run, run Rudolph”, escrita por Johnny Marks y Marvin Brodie, fue
popularizada por Chuck Berry en 1958. El villancico sigue estando más de moda
que nunca. Y con mucho ritmo.
The Christmas Song
Nat King Cole
https://www.youtube.com/watch?v=hwacxSnc4tI&ab_channel=WalterTan
Bob Wells y Mel Tormé escribieron
esta canción en 1945 también durante un verano abrasador. Es un tema que ha
sido grabado por innumerables artistas, desde Bing Crosby, Frank Sinatra, Andy
Williams, Stevie Wonder, Glen Campbell, Paul McCartney y Bob Dylan.
Instrumental
Los Peces en el Río
The Harmony Group
Canciones navideñas en castellano
Dúo Dinámico
Balada de Navidad
https://www.youtube.com/watch?v=SLpHVTOI350&ab_channel=CarmenLanda
Ven A Mi Casa Esta Navidad
Luis Aguilé
https://www.youtube.com/watch?v=MNgq4t4grN0&ab_channel=MiguelJPR
El niño del tambor
El Tamborilero por Raphael
https://www.youtube.com/watch?v=quY2W1pT9V8&ab_channel=JuanDragon
Feliz Navidad
Inca Son
https://www.youtube.com/watch?v=uJoPgV4SGdI&ab_channel=IncaSon-Topic
Agradecimiento
Ana María Bianchi
(Imágenes de Internet)
La revista puede ser descargada mediante el
siguiente enlace de MediaFire
https://www.mediafire.com/file/4oqolfvp8h1f3f4/No+825+A+Diciembre+25.docx/file
http://elpoderdelapalabravisverbum.blogspot.com/
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